En el último viaje que hice a Granada encontré algunos cambios que me sorprendieron agradablemente. Es una ciudad en constante evolución que trata de adaptarse a los nuevos tiempos sin abandonar sus raices y su encanto. Para comprobar lo que estoy diciendo, solo hay que hacer una visita al Albaicin. Sus calles resuman encanto y en algunos momentos crees estar en Marruecos pero al mismo tiempo, te encuentras con un barrio encantador de nuestro tiempo.
Si estás en Granada es impresindible visitar la Alhambra y los Jardines del Generalife.
Cuando visitas el Generalife es como trasladarte al mundo de los Califas, con sus fuentes ,paseos y jardines que te invitan al sosiego y la paz interior, al mismo tiempo que te sientes mas cerca del Cielo.
Subiendo desde Plaza Nueva por la Carrera del Darro, puedes ver a la derecha la Alhambra con su fortaleza impresionante y en lo mas alto la capana de la Vela y a la izquierda el barrio del Albaicín.
Siguiendo por éste paseo, encontrarás los baños árabes, coventos e iglesias.
Si estás en Granada es impresindible visitar la Alhambra y los Jardines del Generalife.
Cuando visitas el Generalife es como trasladarte al mundo de los Califas, con sus fuentes ,paseos y jardines que te invitan al sosiego y la paz interior, al mismo tiempo que te sientes mas cerca del Cielo.
Subiendo desde Plaza Nueva por la Carrera del Darro, puedes ver a la derecha la Alhambra con su fortaleza impresionante y en lo mas alto la capana de la Vela y a la izquierda el barrio del Albaicín.
Siguiendo por éste paseo, encontrarás los baños árabes, coventos e iglesias.
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